A raíz de que la semana pasada, el 30 de junio de 2017, se bautizara el nuevo barco de la naviera alemana AIDA Cruises, el Aida Perla en Palma de Mallorca, quiero comentarte cómo es este magnífico buque, que tiene base en Palma y que ha sido calificado como el barco más ecológico hasta el momento.
La travesía habitual de este barco para todo el verano ha sido Palma de Mallorca Barcelona, sin embargo desde el mes de septiembre comenzará a navegar por Portugal, Noruega, Holanda, Bélgica, Francia o el Reino Unido diversificando sus propuestas de vacaciones para este otoño. Eso sí, como siempre te digo, aunque puedes encontrar personas de la tripulación que hablen español, el idioma oficial a bordo es el alemán y no hay información en inglés, ni siquiera en las excursiones.
Y ahora sí te cuento las características de este magnífico barco.
Características técnicas generales
El buque es muy nuevo, como te comentaba al principio de 2017, y estas son en cifras sus caracterísiticas generales: pesa 124.500 toneladas, mide 300 metros de longitud y 37 metros de manga. Cuenta con 16 cubiertas para pasajeros con restaurantes, snackbars, cafés y bares.
Las instalaciones incluyen una zona de escalada, toboganes de agua, minigolf, cine, tearo, casino, discoteca, una pista para pasear de cristal a 45 metros sobre el nivel del agua, gimnasio, spa y tiendas de lujo.
Su capacidad es de 3.400 pasajeros, además de 900 tripulantes, pero lo más importante o característico es que se ha convertido en una de las naves tecnológicamente más avanzada del mundo porque está equipado con tecnología de automatización que controla y monitoriza funciones claves a bordo.
El casco del AIDA Perla está diseñado para reducir la fricción con el mar, de manera que se reduce así el consumo de combustible. Sus emisiones de óxido de nitrógeno, óxidos de azufre y partículas de hollín quedan reducidas entre un 90 y 99 por ciento.
Otra novedad de este barco es que sus cuatro motores principales son de doble combustible, por una parte, fueloil pesado y, por otra, gas natural licuado.
Algunos de los detalles que lo llevan a ser nombrado como el buque más ecológico del mundo es por ejemplo, su lavadora robotizada que emplea cantidades mínimas de agua y detergente, ¡y que devuelve la ropa doblada!, sistema de reciclaje por osmosis por el que apenas tienen que reponer agua en los puertos de atraque, y una planta incineradora propia gracias a la cual apenas depositan basura en tierra.
Gracias a su sistema de reciclaje de agua por osmosis, gracias al que prácticamente no tiene que reponer agua.
Hasta el spa está pensado siguiendo criterios ecológicos, está equipado con materiales naturales y todos los productos que se utilizan en él no han sido testados en animales y son biodegradables.
Todos los camarotes de a bordo, los 1.643 repartidos en 14 tipos diferentes, están equipados con alfombra, aire acondicionado, TV vía satélite, radio, secador de pelo, caja fuerte y teléfono directo. Aparte están decorados hasta el más mínimo detalle, como por ejemplo una máquina de café o un menú de almohadas.
La capacidad máxima que vas a encontrar es para cuatro personas. Si reservas tu camarote suite tendrás una serie de ventajas como bienvenida con vino espumoso, bombones y fruta fresca, menú de 3 platos en la noche de bienvenida en un restaurante a la carta, tienes prioridad para hacer el check-in, o el check-out el día del desembarque, aparte del 50% de descuento en a zona relax.
La oferta gastronómica no te va a decepcionar ya que tiene 12 restaurantes, 3 snack y 14 bares que invitan a un viaje de sabores por todo el mundo. Especialmente interesante me parece la propuesta del restaurante familiar Fuego, al lado del club de niños y de la cubierta de actividades four Elements, es un buffet especial para niños. A parte que son los sabores más sanos y a la vez ricos que le gustan a nuestros hijos, la medida está hecha pafra ellos.
Obviamente viajando por el Mediterráneo y saliendo de Palma no podía faltar un bar de tapas calientes y frías, vino, sangría, jerez, brandy…y todas las delicias. Hablando de delicias la costa francesa tampoco se queda atrás y tiene su representación en la Brasserie French Kiss, con patés, quesos, y vinos selectos.
En el barco hay un club para los mayores de 3 años, hasta los 11, en el que se les proponen actividades didácticas, lúdicas en la línea de aventuras y exploraciones. Y además está el Mini Club en el que se cuida a los cruceristas más pequeños entre 6 meses y 3 años. Estos dos espacios se encuentran muy cerca de la zona de actividades llamada Four Elements, donde tienes de todo para toda la familia: tobogán de agua, baños relajantes, juegos para niños, escalada, mini golf, pista de patinaje sobre hielo (esto solo en invierno), instalaciones deportivas.