Una primera impresión de estas imágenes puede engañar a los ojos más curiosos… no se trata del Caribe, pero bien podría ser uno de los rincones más paradisíacos del mundo. Muchos de los turistas que han tenido el privilegio de viajar consideran que se trata de uno de los más valiosos paraísos naturales que atesora España.
¿Qué es la Costa Blanca?
La Costa Blanca es el nombre turístico asignado a la bella costa del Mediterráneo que comprende desde el municipio de Denia hasta el de Pilar de la Horadada (provincia de Alicante) y deslumbra a cientos de veraneantes cada año con sus más de 240 kilómetros de playas, calas y acantilados. Uno de los aspectos más llamativos de su patrimonio natural es la gran diversidad de ecosistemas que se fusionan armoniosamente, pudiendo encontrar desde el exótico Palmeral de Elche hasta las sierras de Alcoy, pasando por una increíble oferta de rutas culturales que incluyen visitas a imponentes fortalezas, parques temáticos y museos.
Descubre las mejores playas y paisajes únicos
A lo largo de la Costa Blanca, un desfile de playas icónicas y calas escondidas esperan a los visitantes para ofrecerles momentos inolvidables. Desde el norte hasta el sur, cada rincón ofrece un tipo de experiencia única:
Playa de San Juan – Alicante
Conocida como la playa más emblemática de Alicante, la Playa de San Juan se extiende por más de 6 kilómetros de arena fina y dorada. Es ideal tanto para relajarse como para disfrutar de actividades deportivas como windsurf o voleibol. Su paseo marítimo está repleto de restaurantes, chiringuitos y cafeterías que le dan un ambiente animado y familiar durante todo el año.
Jávea: Naturaleza y aventura
En la costa de Jávea, a lo largo de casi 25 kilómetros, los veraneantes descubrirán el entorno ideal para practicar deportes acuáticos como windsurf, piragüismo o rutas en motos acuáticas. Entre sus parajes destacan calas de roca como la Cala Granadella, conocida por su impresionante entorno natural, aguas cristalinas y su popularidad para practicar snorkel. Además, los aficionados al ecoturismo podrán recorrer diferentes rutas como las del Parque Natural del Montgó que ofrecen vistas espectaculares del Mediterráneo.
Calpe y su icónico Peñón de Ifach
La ciudad de Calpe es famosa por su Peñón de Ifach, una formación rocosa que se eleva majestuosamente sobre la costa y que sirve como un símbolo de la Costa Blanca. Además, sus playas como la Playa de la Fossa y la Playa Arenal-Bol combinan zonas para el relax con senderos cercanos y actividades como el escalado en el propio peñón.
Descubre Altea, un pueblo de encanto
Otro punto destacado es Altea, conocido por su casco histórico con calles empedradas y sus casas blancas que crean un contraste espectacular con el azul del mar. Sus playas, como la Playa de Albir, tienen condiciones ideales para los deportes acuáticos. Además, los paseos nocturnos por el puerto deportivo ofrecen una experiencia mágica.
Santa Pola y la Isla de Tabarca
A pocos kilómetros de Santa Pola encontramos la Isla de Tabarca, la única habitada de la Comunidad Valenciana. Declarada Reserva Marina Natural, es un destino perfecto para los apasionados del buceo y la fotografía submarina. Sus aguas cristalinas y su rica biodiversidad marina son el hogar de numerosas especies.
Gastronomía de la Costa Blanca
La Costa Blanca no solo brilla por sus playas y paisajes, sino también por su deliciosa gastronomía. Los sabores de la región están profundamente influenciados por su cercanía al mar y la rica tradición agrícola de sus comarcas. Entre sus especialidades destacan:
- Arroces: Desde el arroz a banda hasta la paella de marisco, los arroces son el plato estrella de la región.
- Pescados y mariscos: Las gambas de Denia y el pulpo seco son auténticas delicias tradicionales que se pueden disfrutar frescos en los restaurantes locales.
- Salazones: Una herencia culinaria de los antiguos fenicios, que incluye mojama, huevas de mújol y ventresca.
La Costa Blanca ofrece mucho más que paisajes espectaculares y playas de ensueño. Sus pueblos, calas y rutas culturales, junto con la riqueza de su gastronomía, convierten a este destino en un lugar imprescindible para los amantes de los viajes.