El gobierno francés ha puesto en marcha una estrategia para posicionarse como principal destino de cruceros, señalando especialmente al mercado chino. La estrategia incluye un plan para el transporte aéreo, que contempla la apertura de rutas directas de largo recorrido en aeropuertos secundarios de Francia, hablamos de Toulouse, Burdeos, Marsella, Lyon o Niza, de forma que estos afrenten el crecimiento de las llegadas de turistas internacionales que se espera para los próximos años.
En año 2030 se esperan 1.000 millones de turistas adicionales en el mundo, esto es el doble de la cifra actual que maneja la Organización Mundial del Turismo (OMT).
Francia prevé recibir 15 millones más de turistas en 2020, de los cuales el 80 % vendrán de larga distancia.
China está arrancando en el mercado de los cruceros y las previsiones apuntan que entre el año 2020 y 2025, habrá más chinos viajando a bordo de megayates y barcos de lujo que estadounidenses. Se prevé una tendencia, que ya caracterizó hace unos años al mercado norteamericano, por la cual tras haber viajado por el Caribe se trasladaron a Europa.
En la actualidad los chinos ya están haciendo cruceros en el Mar de China, luego irán a Europa, y después al Caribe. Al menos, así cree el gobierno francés que se comportará el mercado chino.
Hoy en día Francia es el primer destino turístico del mundo y el segundo territorio marítimo después de EEUU, contando con sus colonias de ultramar, además es uno de los líderes en construcción de megabarcos de cruceros. Sin embargo, tan sólo es el sexto destino de embarques de cruceros. La estrategia que se plantea ahora es invertir en los puertos para que tengan capacidad de recibir los cruceros y en especial, aquellos que vienen desde los destinos lejanos, como China.