Ya sabemos que a veces los sueños pueden convertirse en pesadillas, y ese crucero maravilloso que llevas meses planeando se convierte en todo un engorro, para que esto no suceda, o si sucede que al menos puedas sentirte compensado de alguna manera es por lo que te recomiendo que hagas un seguro de viaje.
Para empezar recuerda que no todos los cruceros tienen la obligatoriedad de compensarte en el caso de que se anule el viaje o alguna de las escalas. Consulta esto antes de cerrar tu viaje, y si te decides por un seguro es el primer punto que debes solicitar que tenga.
Puedes mirar distintas compañías y opciones, pero te voy contando algunas características y cualidades que la mayoría de los seguros tienen, y que te cubren tanto a bordo del barco como en tierra.
Una de las cuestiones importantes es el tema de la salud, y los seguros cubren asistencia internacional 24 horas, visitas al médico, o intervenciones quirúrgicas. Por ejemplo un buen seguro te cubre hasta 30.000 euros de gastos médicos ampliables, incluidos gastos odontológicos.
En este sentido también en caso de enfermedad, si el viaje es en Europa, se incluye (por lo general) el avión sanitario y la repatriación en caso de fallecimiento. Y esto hasta dos acompañantes.
Otro tema que es importante es el seguro de pérdida de equipaje. Es raro que pierdas el equipaje durante el embarque, pero si llevas incluido el avión y el crucero en el precio del viaje, y se pierde, entonces sí puedes tener derecho a indemnización por la pérdida del mismo. Las tarjetas de créditos suelen cubrir este gasto simplemente con haber pagado el viaje con ellas. Revísalo antes de cerrar la transacción.
Lo que sí puedes contratar es que el seguro te cubra el robo de objetos de valor, o del equipaje en el barco. Lo cierto es que no suelen ocurrir a bordo, pero si tienes la mala suerte de que te ocurra en alguna excursión en tierra, al menos, como te decía al principio te repara en el disgusto, y te ayuda a afrontar la situación desde otro lugar, mucho más tranquilo.