Nadie quiere tener una mala experiencia en un crucero, ni en un crucero ni nunca, pero a veces sucede, y resulta que el viaje no se desenvuelve como esperabas. Si llegase este caso, obviamente puedes reclamar, y desde aquí quiero darte algunas pistas de cómo puedes hacerlo.
Lo primero es comunicarlo directamente en la recepción del barco o en el lugar que se te indique. La mayoría de las quejas se pueden resolver sobre la marcha. A veces se trata simplemente de un malentendido.
Si no fue así puedes enviar un mail o carta de queja, en la que dejes claro cuál es el motivo de tu queja y qué esperas. Es importante que se lo envíes a la persona adecuada, investiga un poco quien es en tu país, el encargado de la oficina, el responsable de calidad de cruceros o relación con los pasajeros…
Te recomiendo que en tu reclamación, a la hora de exponer ltu queja seas lo más sencillo, o sencilla posible, libre de emociones, y siendo absolutamente correcto. Sé lo más claro y específico que puedas a la hora al definir el problema o incidente y, siempre es conveniente recalcar que ya quisiste resolverlo en el crucero.
Que seas claro y concreto implica también que incluyas el mayor número de detalles posibles, con las fechas, lugares, personas que se vieron involucradas. Esto no significa que hagas un testamento, lo ideal sería que tu reclamación no pasase de las 600 palabras.
Explica tu perjuicio, cuál es el motivo de tu disgusto, cuánto dinero perdiste, o los inconvenientes que el incidente te ha supesto.
Sé conciliador, o conciliadora, presenta una oferta de cómo se podría solucionar el problema. Ya te digo que es muy raro que te ofrezcan un crucero gratis, a no ser que el problema haya sido realmente importante, pero sí es bastante común que te ofrezcan algún tipo de descuento o una compensación para tu próximo crucero.